La tensa relación entre una madre y su hija lesbiana durante un encuentro es patente. La hija revela el abuso sexual que sufrió por parte de su padre. La traición de la madre es evidente ya que está atrapada entre la verdad y lo que le gustaría creer.

La hija más adelante reflexiona sobre el abuso que sufrió durante su infancia mientras trata de lidiar con sus emociones y sentimientos internos que la afectan tanto en su vida cotidiana como en su relación de pareja.

El corto fue escrito, dirigido, filmado y producido en su totalidad por mujeres, algunas de las cuales han luchado contra los abusos cuando eran niñas, siempre sabiendo que eran diferentes y parte de la comunidad LGBTQ.