El PP descarta regular las parejas homosexuales dentro de la institución jurídica del Matrimonio

El proyecto de Ley presentado por el Gobierno para regular el acceso al matrimonio por las parejas homosexuales superará mañana, previsible, su primer trámite parlamentario por parte del Pleno del Congreso de los Diputados.

Gracias a los votos socialistas y de sus socios parlamentarios, la Cámara Baja rechazará, en un debate a la totalidad de la Ley, los textos alternativos presentados por el Grupo Popular y diputados de Unió (formación política de principios democristianos incluida en el Grupo Catalán, con libertad de voto).

En líneas generales, el PP pide a la Cámara, la devolución del proyecto de Ley al Gobierno al entender que la regulación contractual de las uniones entre parejas homosexuales no debe realizarse en el ámbito jurídico del Matrimonio tradicional.

El PP entiende que su postura coincide con el planteamiento del Consejo de Estado y de otras instituciones, como el Consejo General del Poder Judicial y encaja mejor con la definición que realiza la Constitución del Matrimonio. De hecho, este grupo ha registrado en el Congreso iniciativas legislativas para dar una regulación a la situación jurídica de las parejas formadas por personas del mismo sexo "sin alterar la institución matrimonial".

Por su parte, los diputados democristianos de Unió rechazan el proyecto del Gobierno al entender que el menor tiene derecho "a un padre y una madre que le cuiden" y a una familia estable que le permita crecer social, cultural y espiritualmente". Igualmente, rechazan la adopción por parte de parejas del mismo sexo.

COMPROMISO ELECTORAL

El texto del Gobierno será defendido en la Cámara por el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar. Ayer mismo, el ministro insistió en que la iniciativa cumple el compromiso expresado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su discurso de investidura y con el programa electoral del PSOE avalado por las urnas en las últimas elecciones generales.

"La iniciativa cuenta con un respaldo muy mayoritario de nuestra sociedad, que está dispuesta a aceptar con tolerancia esas formas de convivencia y afectividad que no van contra nada ni contra nadie", subrayó el titular de Justicia.

Más allá del ámbito parlamentario, el texto del Gobierno también ha suscitado opiniones encontradas en el seno de la sociedad. Los principales defensores son el colectivo Gay, que reclama un reconocimiento legal y social, por parte del Estado, que garantice la igualdad en derechos y obligaciones respecto al resto de los ciudadanos.

Sobre este punto, la Fundación Triángulo señaló hoy en un comunicado que "el Partido Popular va a quedar, una vez más, como el grupo que intentó impedir la igualdad". "Ya le ocurrió con el divorcio y los propios militantes del PP se asombran, cuando hasta los ministros del PP se divorcian", asertó.

Por contra, la principal oposición social reside en la Iglesia Católica, empezando por el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez. "Para mí la familia esta fundamentada en el matrimonio como unión de vida y amor, entre hombre y mujer, estable, para la transmisión de la vida", señaló en sus primeras declaraciones tras ser nombrado presidente de los obispos españoles.

Por parte de los seglares, la principal asociación que ha mostrado su rechazo es el Foro de la Familia, que ha iniciado una campaña de recogida de firmas para impulsar una iniciativa legislativa que fortalezca la institución del Matrimonio como "la unión de un hombre y una mujer" y la protección de la infancia frente a la adopción por parejas del mismo sexo.

LA LEY

En definitiva, el proyecto del Gobierno pretende regular la unión entre personas del mismo sexo y equiparar los derechos entre parejas heterosexuales y homosexuales. Para ello, el Ejecutivo prevé la modificación de varios artículos del Código Civil relativos a la unión matrimonial con el objetivo de permitir la unión entre parejas del mismo sexo, así como otras serie de derechos para su equiparación a los heterosexuales como pensión, herencia y adopción.