Organizaciones que defienden la implantación de una escuela laica consideran que la administración debe vigilar los contenidos de los libros de texto sobre Educación para la Ciudadanía para que cumplan el temario establecido por el Ministerio.

Durante la presentación de la campaña 'Por una sociedad laica, la religión fuera de la escuela', el representante de la CEAPA (Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos) Fernando Martínez ha lamentado que haya manuales 'que discrepen tanto con lo que es el currículo', y estima que corresponde a las autoridades educativas determinar si esta situación 'es útil y si se puede utilizar para impartir esta asignatura'.

Desde IU, Loles Dolz considera que se está produciendo 'una dejación de funciones' y que se debe 'entrar a saco a analizar esos manuales, igual que se ha hecho con otros de filosofía o sicología' para impedir que la implantación de esta asignatura se convierta 'en una vía de ideologización complementaria de la religión y la moral católica'.

El representante de los profesores, Augusto Serrano, presidente de STES-i ha recordado que los libros de texto 'no pasan ningún filtro, pero que si los manuales atentan contra la legislación, las administraciones deben actuar', pudiendo hacerlo a través del abogado del Estado.

Para el vicepresidente de Europa Laica, Francisco Delgado, la Iglesia Católica 'está haciendo caja' con esta asignatura, ya que opina que 'ha vendido más libros que todas las demás editoriales juntas en las comunidades donde se ha implantado este año esa asignatura', y pide que no se haga ninguna cesión, en alusión a las palabras de la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, de que cada colegio puede adaptarlo a su ideario.

Desde el Sindicato de Estudiantes, Juanjo López ha advertido de que manuales como el de la editorial Casals pueden convertirse en otra asignatura más de religión, y opina que no debería utilizarse para impartirla.

El presidente de la Federación Estatal de Gays, Lesbianas, Transexuales y Bisexuales, Toni Poveda, ha explicado que han presentado una denuncia contra la mencionada editorial para que sea retirado, por la definición que hace de matrimonios, excluyendo el formado por dos personas del mismo sexo.

La campaña en defensa de una escuela laica plantea que la religión salga fuera del horario lectivo, exige la derogación de los acuerdos del Estado Español con el Vaticano y pide que en los centros públicos o con financiación pública no haya ninguna simbología religiosa.

Citando datos del Consejo Escolar, explica que aumenta el número de alumnos que no cursan religión en la escuela pública y que este año se sitúan en torno al 80 por ciento en Bachillerato (en 2005-06 fue del 61%), al 60 % en ESO (el curso anterior fue el 53,4) y al 30 por ciento en primaria (que fue del 24,4).

Las organizaciones que impulsan esta campaña celebrarán mañana un acto público, con la intervención de líderes políticos y personalidades del mundo de la educación y de la cultura.