La australiana Iglesia Unida (Uniting Church) ha votado, en una asamblea nacional celebrada en la ciudad de Melbourne, a favor de permitir a los homosexuales practicantes llegar a ser sacerdotes. Formada en 1977 por la unión de las iglesias presbiteriana, metodista y congregacional de Australia, la Iglesia Unida debatía desde hace años la posibilidad de que gays y lesbianas formaran parte de su clero. En 1997 la orden reconoció que podía haber miembros de la iglesia que entendieran las escrituras de forma distinta y tuvieran diferentes formas de entender su sexualidad, pero no admitía abiertamente la existencia de sacerdotes homosexuales. Pese a las amenazas de los conservadores Tras un debate de dos días, y a pesar de la amenaza del grupo conservador de abandonar la congregación, la Iglesia se ha convertido en la primera de las principales órdenes religiosas australianas en aceptar abiertamente a ministros homosexuales. Aunque la mayoría de los 260 delegados que participaron en la asamblea votó a favor de esa decisión, el sector conservador ha advertido que este cambio provocará que la orden pierda miles de miembros. La Iglesia Unida de Australia es la tercera mayor orden cristiana del país y cuenta con unos 300.000 miembros y cerca de 1,3 millones de asociados, según datos aportados por la propia congregación.