Creemos que merece la pena reflexionar acerca de los animales de compañía, perros y gatos, y sobre como se los protege cuando alguien los castiga con el abandono.

En general, para la gran mayoría de las Administraciones, el tema de los abandonos es una cuestión de higiene publica y, por tanto, las leyes de protección animal son en realidad leyes del control zoosanitario, o lo que es lo mismo, leyes para controlar y eliminar los excedentes de animales. Visto desde esta perpectiva, no debería alarmarnos el hecho de que solo en los Centros de Recogida Animal de la Comunidad de Madrid durante los últimos 4 años se hayan recogido 42.996 animales(perros y gatos) y se hayan eliminado a 24.004 de estos animales (datos oficiales facilitados por la Comunidad de Madrid) bajo el amparo de la ley de protección animal de esta Comunidad; son solo cifras, pero intentemos imaginar estos perros y gatos, uno por uno hasta llegar a 24.004 animales ¿no resulta terrible? ¿hasta cuando vamos a seguir castigando el abandono con la muerte? [...]


Por otro lado, nos enfrentamos con el rentable negocio que supone el abandono, amparado nuevamente por la ley, es el caso de entidades y empresas que, aparte de contar en numerosas ocasiones con subvenciones y/o contratas con Ayuntamientos locales, se lucran además de forma vergonzosa a costa de la vida de los animales; estas entidades recogen perros a cambio de dinero-unos 120 de media por animal entregado-, porteriormente el animal es sacrificado una vez transcurrido el plazo legalmente establecido por la ley(unos diez días) y el negocio es redondo, mas aun cuando en ocasiones ni siquiera se respeta el plazo legal.


Por ello, valdría la pena reflexionar y buscar soluciones, solo es cuestión de voluntad y valentía política Pe¿acaso es tan difícil? Pensamos que no, todo es proponérselo. Pero que al menos no nos engañen y dejen de hablar de protección, cuando la única solución, al menos de momento, sigue siendo la muerte.

(Editorial publicada por el boletín informativo el refugio julio 2003)