Su-yeon vive una vida tranquila. Aunque no está enteramente feliz con su vida, acepta su suerte y se concentra en lo que siente que tiene que hacer, hasta que Maya entra en su vida.

Maya no vive una vida tranquila. Tiene una banda de punk-rock. Ella descubre a Su-yeon y su trabajo con los clientes, a través de una ventana de un salón de belleza y decide conocerla.

A medida que los avances de Maya son mas directos, Su-yeon entra en una crisis de fe, cuestionándose sus reglas. Se debate entre su fe y los nuevos deseos.