Rachel se casa hoy con Heck. Mientras sus amigos le ayudan y su familia no hace más que molestar, Luce - la florista - arregla las decoraciones florales en la iglesia.

Rachel se dirige a la iglesia con su padre Ned, que rememora el desastre que fue el día de su boda hasta que Rachel le hace callar. En el exterior de la iglesia Luce se encuentra con Heck y con el padrino, Cooper, que se siente inmediatamente atraído por ella. Luce hace caso omiso a sus insinuaciones e intentará marcharse aunque al final le convencen para que se siente al lado de la hermana de Rachel, H, de ocho años.

Poco antes del inicio de la ceremonia Luce intenta marcharse de nuevo pero en ese momento Rachel empieza su recorrido hacia el altar. Sus miradas se cruzan durante un segundo. Luce abandona la iglesia para ir a arreglar las flores en el lugar del banquete. Rachel y Heck ya se han casado. La madre de la novia la invita a quedarse al banquete, donde conoce a la feliz pareja.

Dos semanas después Rachel pasa por la tienda de Luce para invitarla a cenar. Planea emparejarla con Cooper, pero antes de la llegada de éste Luce le cuenta a Heck que es lesbiana. Cooper no tiene ni idea e intenta ligar con ella mientras Rachel y Luce discuten acerca de lo que es el amor.

Ficha Artística

Piper Perabo: Rache
Lena Headey: Luce
Matthew Goode: Heck
Celia Imrie: Tessa
Anthony Head: Ned
Sue Johnston: Ella
Darren Boyd: Cooper
Eva Birthistle: Edie
Sharon Horgan: Beth
Vinette Robinson: Zina

Dirección: Ol Parkez
Género: Comedia Romántica

Notas de producción

Para su primer largometraje Ol Parker se inspiró en la idea del amor a primera vista: “Quería hablar acerca del amor, la pasión y la fuerza de la naturaleza”, declara el director, conocido guionista de la BBC (Loved Up, In Your Dreams) además de autor del largometraje It Was An Accident, protagonizado por Thandie Newton y Chiwetel Ejiofor.

“Me encargaron el guión de Rosas Rojas y a mitad de camino me di cuenta de que escribía de una determinada manera porque quería dirigirlo yo mismo”, explica Parker. “Sentí que conocía perfectamente a los personajes, su mundo, los matices y la historia”.

La productora Sophie Balhetchet, de Cougar Films, recibió el guión de parte del agente de Parker y le cautivó desde el principio: “Era conmovedor y gracioso y me gustaba mucho la idea central. Si experimentas un amor a primera vista cuando estás en otra relación, ¿qué haces? ¿Actúas o le vuelves la espalda? Si tiene tanta fuerza, ¿te atreves a dejarlo pasar? El planteamiento le dio una complejidad muy original dentro del género de la comedia romántica y nunca dudé de que la visión de Ol se llevara a la gran pantalla”.

Para el productor Barnaby Thompson, de Fragile Films, el guión fue la clave: “Lo que había escrito Ol me absorbió por completo. Tiene la rara capacidad para crear los personajes a través del diálogo, que es la clave de los grandes guiones. Es una historia de amor contada con humor”.

Como director primerizo, Parker pensó que sería mejor rodearse de los mejores profesionales: “Si tienes la suerte de conseguir el equipo que quieres sabes que ellos se encargarán de todo. Mi metodología como director consistió en contratar a las personas apropiadas y después quitarme de en medio para que hicieran su trabajo. Unos días antes del inicio del rodaje mi mujer me dijo: ‘Estás a punto de dirigir tu primera película. No tienes idea de lo que haces. ¿Por qué no estás aterrorizado?’. Lo pensé un poco y le contesté, “porque hay gente inteligente que me guarda las espaldas’”.

Piper Perabo - Rachel

Para el papel de Rachel, la recién casada que se enamora de otra persona, los cineastas eligieron a Piper Perabo.

Parker ya era un gran admirador de su trabajo: “Piper siempre me ha parecido estupenda: es inteligente, valiente, divertida y muy guapa, y estos dos últimos adjetivos pocas veces van juntos. Lo que pasa es que no quería reescribir el papel; el personaje de Rachel tenía que ser inglés y tampoco quería aguantar un acento mal copiado, de los cuales hay muchos en el cine reciente. Fui a Nueva York para verla sin muchas esperanzas, pero antes de irme hablé con un profesor de voz que me dijo, “entérate si lee. Si lee y es lista no tendrás problemas’. Así que quedamos, hablamos de libros – ella ha leído más que yo – y me quedé encantado con ella”.

A Perabo le entusiasmó el proyecto: “Me encantó el guión y supliqué para que me dieran el papel. Ol viajó a Nueva York y leímos casi todo el guión juntos. Está tan bien escrito que se sale de la página. Los diálogos son naturales y originales y tienen todo lo mejor de las comedias románticas británicas”.

Con respecto a su personaje, Perabo lo describe como “espontáneo, mientras que Heck es fiable y dulce: no son la pareja perfecta. Al final, la película trata de dos personas destinadas a estar juntas”.

Para Sophie Balhetchet era importante que no se viera a Rachel como una persona maquinadora: “Está con un hombre maravilloso que no ha hecho nada malo, pero ella está pensando en dejarle. Para el papel de Rachel era necesario contar con una actriz capaz de parecer dulce y franca y Piper posee esas cualidades a raudales”.

Para Barnaby Thompson es un papel difícil porque “Rachel emprende un viaje en el que hay que creer y el hecho de que Heck sea un tipo tan simpático dificulta la situación. Pero Piper lo consigue porque es tremendamente encantadora”.

Lena Headey - Luce

Parker tenía las ideas muy claras acerca del papel de Luce: “Necesitábamos a alguien que justificara el hecho de que Rachel abandonara a Heck, pero también una actriz capaz de mostrar culpabilidad, dolor, inteligencia y un fuerte sentido de la moralidad y la decencia”. La conocida actriz británica Lena Headey era perfecta para el papel.

“Conozco a Lena desde hace años”, señala Parker. “Participó en Loved Up - mi primer guión - y es guapa, honesta, divertida, sin vanidad y excepcionalmente lista”.

El director subraya la dificultad que entraña el papel de Luce diciendo: “El deterioro de su relación con Heck dramatiza el viaje emocional de Rachel pero Luce tiene que sugerir mucho más, a menudo simplemente a través de las conversaciones con sus clientes. Y Lena es muy capaz de hacerlo”.

Sophie Balhetchet está de acuerdo: “Hay que sentir que la fuerza que las une es infinitamente mayor que cualquier tipo de intriga o falta de amabilidad que pueda ocurrir entre ellas. Hacen grandes esfuerzos por no verse, por evitar la atracción que sienten, y las actitudes comedidas pero muy coherentes de Lena concuerdan perfectamente con el ritmo del guión de Ol. A veces surge así, algunos actores encajan con algunos guionistas de un modo intangible”.

Piper y su coprotagonista Lena Headey ya eran amigas antes de rodar Rosas Rojas y recientemente habían filmado La caverna maldita en Rumania. Parker explica que las dos actrices se lo pasaron bomba durante el rodaje: “Mi principal problema era conseguir que dejaran de reírse el tiempo suficiente para decir los diálogos. Esperemos que esta gran química y cariño se traslade a la pantalla”.

Por su parte, a Lena Heady le interesó mucho el guión: “Pocas veces lees un guión del que te enamoras. En Rosas Rojas todos los personajes son muy divertidos pero también muy honestos. No quería ponerme en una situación muy comprometida al decir ‘por favor, déjame hacerlo’, pero me dio una gran alegría cuando conseguí el papel”.

Alaba el trabajo de Ol Parker como director primerizo diciendo que “cuando vas al plató poco veces encuentras un ambiente relajado y aquí lo tuvimos gracias a Ol, que se ha rodeado de un equipo estupendo. Ojalá los pudiera llevar conmigo a mi próximo trabajo”.

En lo referente a su personaje, Headey dice que Luce vive algo apartada del mundo: “Le ha educado su madre, que de algún modo ha dejado de tener esperanzas en la vida. Luce no intenta entablar una relación con Rachel, simplemente ésta aparece y pone su mundo patas arriba”.

Anthony Head, conocido por su papel en Buffy cazavampiros, hizo reír tanto a Ol Parker durante su prueba que le eligió inmediatamente para el papel de Ned, el padre de Rachel. El guión atraía mucho al actor porque la historia que cuenta les afecta a todos: “No hay ningún personaje plano porque todos acaban emprendiendo un viaje que los lleva a reflexionar sobre algún aspecto del amor”.

Sophie Balhetchet describe Rosas Rojas como “una comedia romántica con un toque original. El hecho de que Rachel, que es heterosexual, se enamore de Luce, que es lesbiana, significa que es realmente un amor a primera vista. Si fuera otro hombre se podría especular sobre lo que ese hombre tiene y que le falta a Heck. El hecho de que nuestra heroína sea heterosexual hace extraordinaria por partida doble esa atracción instantánea. Es una magnífica dramatización del tema central de la película”.